miércoles, 25 de enero de 2017

Éxodo 9-12

Mis espectativas del pueblo de Israel


"Y en aquel mismo día sacó Jehová a los hijos de Israel de la tierra de Egipto por sus ejércitos".Génesis 12:51

Cumplió su promesa. Dios liberó a los descendientes de Israel, les dio promesas, les mostró maravillas y les dio líderes fieles. Pretenderé que no he leído el resto de la historia y diré que espero, entonces, que este pueblo responda en agradecimiento a tan grande amor y misericordia. Seguramente le serán fieles a Dios ahora que han visto su poder. Vivirán para él sin quejarse y sin reprochar nada. Se olvidarán para siempre de Egipto y serán la nación grande y poderosa que Dios les prometió ser. Veremos que pasa.

2 comentarios:

  1. Éxodo 10:11 10:24

    11 No será así; id ahora vosotros los varones, y servid a Jehová, pues esto es lo que vosotros pedisteis. Y los echaron de la presencia de Faraón.

    24 Entonces Faraón hizo llamar a Moisés, y dijo: Id, servid a Jehová; solamente queden vuestras ovejas y vuestras vacas; vayan también vuestros niños con vosotros.

    El Faraon no quería que el pueblo de Israel saliera con todos sus miembros libre (niños,ancianos,mujeres,varones,animales,
    propiedades) sin embargo Dios mando que todos salieran con el propósito de que lo alabarán y sirvieran.
    Así nosotros debemos de servir a Dios con toda nuestra vida y corazón, sin escatimar nada o sin poner alguna excusa como el Faraón lo hizo. El quiere que le entreguemos lo que somos para que haga la obra y cumpla el propósito que tiene en nuestras vidas .

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  2. “Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto.”
    ‭‭Éxodo‬ ‭12:13‬ ‭

    Jehová pasaría para destruir a todo primogénito, sin excepción alguna. Pero al pueblo de Israel le dio una instrucción: pintar los postes y el dintel de su casa con la sangre del animal que esa noche comerían.

    La paga del pecado es muerte, nosotros estábamos condenados a morir, pero la sangre de Jesús nos justificó y nos es señal de salvación, por su sangre fuimos lavados, justificados, perdonados y ahora somos salvos.

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